«Siento una profunda alegría por la presencia de todos Uds. en esta misa de mi despedida de María Ayuda, porque ustedes son quienes me han acompañado con fidelidad, con cariño y con mucha generosidad en la tarea que se me encomendó por tantos años. Creo en los vínculos de amistad verdadera, creo que nadie construye su vida sin entrelazar sus manos con otros. Y mi alegría es sentir que con Uds. hemos continuado juntos esta linda obra comenzada por el Padre Hernán hace cuarenta años, por el bien de miles de niños a lo largo de Chile», con esas sentidas palabras comenzó su homilía el padre Francisco «Pancho» Pereira en la que fue su última misa como Director Pastoral de María Ayuda tras veinte años en el cargo.
La misa se efectuó en la Iglesia del Espíritu Santo, en el Santuario de Bellavista y contó con la presencia de varios padres del Instituto, familiares y cercanos al padre, funcionarios de la obra social, niños de los hogares, entre otras personas.
La ceremonia contó con varios momentos emotivos como por ejemplo cuando varios niños acogidos por la Fundación María Ayuda rodearon al padre Pancho para mostrarle su cariño o cuando le hicieron llegar un cuadro con un dibujo hecho por los niños en su honor.
Otro momento destacado de la misa, fue cuando el padre Claudio Martínez Felmer, quién asumió como nuevo Director Pastoral, recibió la cruz de la unidad de parte del P. Pancho como símbolo del traspaso del cargo.
Emocionantes palabras desde María Ayuda
Durante la ceremonia también se hicieron parte varios colaboradores de María Ayuda que aprovecharon la instancia para dedicarle algunas palabras al padre Francisco Pereira.
«Agradecemos como hizo suya la urgencia de ayuda a la niñez desvalida, promoviendo apasionada y valientemente su cuidado en el área pública; aceptando asumir el enorme desafío de dar hogar y dignidad a la vida de niños, niñas y jóvenes que lo necesitaban», señaló Paula Morales, parte del equipo Pastoral de María Ayuda en la acción de gracias de la misa.
Por su parte, Ignacio Concha, director ejecutivo de María Ayuda al terminó de la misa dio un emotivo discurso que cerró con estas palabras:
En nombre de todos los que trabajamos en María Ayuda, le agradecemos, por su visión, por su guía, y sobre todo, por el calor y la acogida que ha brindado a cada uno de nosotros. Que su camino futuro esté lleno de bendiciones y éxitos. Le extrañaremos, pero sabemos que siempre será parte de la familia de María Ayuda, en la ha estado por más de 20 años, con tanto amor. Que Dios y la Mater le guíen en cada paso de su viaje. ¡Muchas gracias!».